Fantasmas

Creo que han sido pocos los días en que no haya pensado, al menos una sola vez, en el porqué.

Nunca me he sentido con fuerzas de buscarte. Pero hay algo de mi que siempre estará inquieto hasta que no logré resolver dudas que me atacan, que no me dejan vivir.

Jamás he reconocido que fueras un impedimento en mi camino, jamás he aceptado hasta que punto me han afectado tus comportamientos a mi forma de ser, a mi forma de ver el mundo, de sentir, de creer. 

Pero creo, que ha llegado el momento, de sentarme frente a ti, de plantarle cara al pasado y pasar página. Porque me pesa demasiado y no me permite avanzar.

Hablo del mundo, de mis amigos, de mis historias de amor, de mi familia, pero no logro articular más de 10 palabras sobre ti. Y es por eso, por lo que soy consciente de que me persiguen fantasmas que no me dejan vivir. Ni siquiera puedo expresarme cuando pienso en ti, ni siquiera puedo desahogarme llorando por ti.

Hay tantas cosas que nunca he entendido. Soy incapaz de olvidar. 

No me dejas querer, no me dejas confiar, no me dejas ser yo, no me dejas sentir, no me dejas disfrutar, no me dejas ser libre, no me dejas ser feliz. Me persigue lo que me hiciste y me persigue la incomprensión de el daño incalculable que causaste.

Quizás si, sea el momento de plantarte cara. 

Solo quiero continuar, y no quiero que tu sigas conmigo.