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Yo misma empezé una batalla tarde, y es por ello por lo que las penas han llegado enseguida.
Tu siempre pides para nunca darme, yo solo pido lo que tu me quitas.
Mi cielo se ha rebentado de repente, esta vez el infierno ha llegado muy deprisa.
Me siento en medio de un desierto, se que solo muere lo que olvidas. Hay corazones llenos de agujeros. El tuyo a más, esta lleno de mentiras.
Todo lo que no se ve, lo que nadie os contó, lo que se quedó en la piel,es la memoria de mi dolor.
Una partida que jugue tan fuerte que ahora es la vida la que esta partida.
Sobra la luz que me hace ver todo lo que yo misma me escondia...
